Vamos ya con la receta.
Debemos dejar siempre 100 gr de masa madre para poder seguir alimentándola y no tener que comprar más levadura química para panes y bollos. Aquí el enlace de la receta de masa madre y cómo cuidarla Aquí el enlace
Ingredientes:
- 200 gr de masa madre
- 500 gr de harina de fuerza
- 20 gr de sal
- 300 ml de agua tibia
Elaboración:
En un bol ponemos la harina con la sal (es conveniente tamizarla siempre para eliminar posibles okupas) Agregamos la masa madre e integramos un poco con una lengua de silicona.
A continuación ponemos casi toda el agua, terminándola de echar si le hace falta porque dependerá del tipo de harina y clima, seguimos con la lengua de silicona integrando hasta que nos permita utilizar las manos, que nos las mojamos con un poquito de aceite de oliva para amasar bien sin que se nos pegue en las manos (no se utilizará más harina con esta proporción de masa madre, si es necesario si se puede añadir más agua) dentro del bol o sobre la tabla de cocina amasamos hasta que quede bien integrado, no hace falta más. Reposará 30 minutos tapada con un paño limpio de cocina.
Una vez pasados los 30 minutos, el amasado será leve, sobre todo tiene reposo que ésto hidratará el gluten. Para ello solo amasaremos cada 15 minutos 4 veces durante 20 segundos nada más.
Comenzamos el primer amasado tras el reposo.
Estiramos la masa con la base de la mano sin romper la masa, doblamos. Así durante 20 segundos. Llevamos al bol, tapamos.
15 minutos después... Segundo amasado. Exactamente lo mismo.
15 minutos después... Tercer amasado igual.
15 minutos después... Cuarto amasado. Hacemos lo mismo. Esparcimos un poco de harina sobre la tabla de trabajo, doblamos hacia el centro redondeando la masa.
Damos la vuelta a la masa, con las manos a 45º seguimos empujando un poco mientras redondeamos para terminar y formaremos ya nuestra hogaza.
Sobre el bol ponemos el paño con harina esparcida, sobre él nuestra masa con la costura hacia arriba, dejamos reposar 3 ó 4 horas para que doble su volumen. En este tiempo se formará la miga.

Transcurrido el tiempo encendemos el horno a 250ºC. Cuando se caliente ponemos en el suelo del horno un recipiente con agua (mi horno es pequeño, pongo una bandeja de 2 centímetros de alto por 14 cm de diámetro llena de agua) Esto creará vapor necesario para hacer la corteza del pan.
Ponemos sobre la bandeja de horno papel vegetal y sobre él con mucho cuidado la hogaza de pan con la costura hacia abajo. Si queremos hacemos unos cortes como más nos guste sobre la superficie con un cuchillo bien afilado (yo usé un cutter)
Lo llevamos al horno horneándolo durante 15 minutos a 250ºC en la parte baja del horno. Iremos bajando a partir de ahí cada 15 minutos aproximadamente hasta dejarlo en 170ºC. La cocción durará 50 ó 60 minutos.
- Podemos conseguir una corteza más crujiente aún pulverizando las paredes del horno cada vez que bajemos la temperatura.
- Si tu horno es muy fuerte por arriba y falta tiempo de horneado pero ya está lo suficientemente tostado, pon un papel de aluminio por encima.
- Si es demasiado fuerte por abajo, dale la vuelta al pan.
Nota:
Se que si es la primera vez que hacemos pan nos dolerá hasta la cabeza leyendo, parecerá un mundo pero, no pasa nada, a mi me ha costado mucho decidirme, de hecho todo este año que llevo con mi blog. Cuando nos veamos preparados, quizá leyendo varias veces será todo un placer hacer pan, quizá es una de las cosas que más gusta hacer ¡Veréis que sabor!